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Change to English¿Sabes cuál es el mayor problema al comprar una vivienda de segunda mano? No lo que ves, sino lo que no ves. Los vicios ocultos son esas pequeñas bombas de relojería que están esperando para explotar… y adivina qué: demostrarlo ante un juez no es tan fácil. Necesitas cumplir ciertos requisitos (y convencer al juez) de que el problema era invisible, grave, y que ya estaba allí cuando la compraste.
¿Te jugarías los ahorros de tu cuenta al rojo en el casino? Entonces, ¿Por qué piensas comprar una vivienda sin contratar una inspección técnica profesional? Una inspección de la casa que vas a comprar te puede salvar la vida (económicamente hablando). Los extranjeros lo tienen claro: nunca adelantan el dinero sin que antes un técnico cualificado haga la inspección técnica del inmueble en cuestión. Si estás a punto de comprar una casa y quieres saber si debes contratar una revisión de la casa, este post te sacará de dudas.
Cuando un comprador se encuentra con defectos ocultos en un bien adquirido, tiene varias opciones legales para reclamar sus derechos y buscar una solución. A continuación, se detallan las principales acciones que puede emprender: la acción redhibitoria, la acción "quanti minoris" y el saneamiento. Estas acciones están respaldadas por la normativa vigente y ofrecen diferentes soluciones según la gravedad y la naturaleza de los vicios ocultos.
Compró un chalet casa de segunda mano y, después de instalarse en ello, descubrió una serie de problemas en la instalación eléctrica y en la instalación solar térmica. La prueba de los vicios ocultos que se consideren graves. Descubre cómo se actuó ante esta serie de imprevistos.
Supongamos que acabas de mudarte a una nueva vivienda. Con el tiempo, comienzas a notar problemas que afectan la estructura y el funcionamiento de tu hogar. Algunos de estos problemas pueden ser evidentes, mientras que otros permanecen ocultos hasta que comienzan a causar inconvenientes significativos. Entender la diferencia entre defectos constructivos y vicios ocultos es crucial para saber cómo abordar estos problemas y proteger tu inversión.
Imagina que finalmente has adquirido la casa de tus sueños. Todo parece perfecto hasta que, meses después, comienzas a notar problemas que no eran visibles a primera vista: una gotera que aparece con las lluvias, el sistema eléctrico que falla intermitentemente o grietas en las paredes que sugieren problemas estructurales. Estos problemas, conocidos como vicios ocultos, pueden convertir tu hogar ideal en una fuente de estrés y gastos inesperados. Entender qué son y cómo manejarlos es crucial para proteger tu inversión y asegurar la habitabilidad de tu vivienda.
Si estás a punto de comprar una vivienda, te recomendamos contratar una Inspección Técnica del Inmueble antes de firmar las arras. Esta inspección exhaustiva ayuda a identificar cualquier defecto o problema potencial que no hayas detectado durante las visitas al inmueble. Sin embargo, si ya es tarde para realizar esta inspección y te encuentras con problemas inesperados, existe la opción del informe pericial, una herramienta legal y técnica esencial para enfrentar esta situación.
Comprar una casa de segunda mano puede ser emocionante y la mejor solución cuando la prioridad del comprador es la localización de la misma, pero hay que tener en cuenta que el riesgo que tomamos en este caso es mayor que cuando compramos una casa nueva a un promotor, ya que en este último año los defectos físicos que puedan surgir estarán cubiertos legalmente por un plazo que va desde un año hasta los diez, en función del tipo de problema.
Comprar una vivienda de segunda mano puede ser una excelente opción para aquellas personas que buscan un hogar en una localización determinada. Sin embargo, al adquirir una propiedad usada, siempre existe el riesgo de que se presenten problemas que pueden causar dolores de cabeza y costosos arreglos en el futuro.
